29.5.08

Ayuda a Juanma

Ya se que cada día mueren niños en el mundo...
Mueren por enfermedades, accidentes, guerras, hambre...
Y que Juanma es un niño más en este valle de lágrimas.
Pero,
esta madre demuestra que la vida es para los valientes. Y ella lo está siendo.
Yo quiero aportar mi granito de arena, y hacer llegar también a través de este blog (que leeis cuatro gatejos) su palabra.


“Estimados señores: Mi nombre es Mª Antonia Fenoy Ramón, tengo 41 años de edad y vivo en el camino del Pavo Real, nº 90 A.Tengo una niña de 5 años llamada Mª del Mar y un niño de 3 años llamado Juanma.

Cuando mi hijo contaba con 22 meses de edad, el 14 de febrero de 2006 y sin haber mostrado anteriormente ningún síntoma que evidenciara alguna enfermedad, observé que la pierna derecha le tembló durante algunos segundos, como consecuencia, no podía permanecer en pié y me dirigí con él al servicio de Urgencias del Hospital Torrecárdenas, donde tras practicarle una resonancia magnética le diagnosticaron una enfermedad extremadamente rara llamada leucodistrofia (enfermedad neurodegenerativa en la que la mielina que es la membrana blanca que envuelve todos los nervios del sistema nervioso tanto del cerebro, como del resto del cuerpo, se va destruyendo).

Esta enfermedad es padecida en un 95% de los casos por niños ya que mueren antes de llegar a adultos. El proceso de la enfermedad es devastador pues el niño va perdiendo todas sus facultades, primero pierden la mielina de los brazos y de las piernas lo que les conduce a un estado tetrapléjico, seguidamente se quedan sordos y ciegos.,suele ser necesaria una sonda nasogástrica para poder alimentarlos pues la deglución se ve imposibilitada. Posteriormente se llega a un estado de descerebración (estado vegetal) en el que permanecen hasta llegar a la muerte, que normalmente suele ocurrir entre los 5 o 6 años de edad.

Esta degeneración suele ser de evolución rápida y cursa con convulsiones y aumento del tamaño de la cabeza.Dentro de la leucodistrofia se diferencian 15 tipos, uno de ellos es la enfermedad de Alexander que es la que padece Juanma, se diferencia de las demás en que no es hereditaria, se produce por la mutación espontánea de un gen ,en el momento de la concepción y es la más rara de todas las leucodistrofias, es decir, a la que menos niños afecta.

En España sólo hay 3 casos. Es por ésta razón que dentro de los presupuestos europeos para la lucha contran la leucodistrofia a la que menos dinero se destina para investigación es a la enfermedad de Alexander, sólo un 3% del presupuesto.
En Torrecárdenas, tras efectuarle a Juanma las pruebas específicas se le diagnostica leucodistrofia, y me dicen que podemos coniocer su enfermedad viendo viendo la película el aceite de la vida. Negándome a quedarme en casa a esperar que mi hijo se muriera en vida (pues él no ha perdido aún ninguno de sus sentidos)compruebo que mi hijo recupera no sólo la capacidad de andar, sino que empieza a correr aunque con dificultad, me desplacé primero hasta el hospital San Juan de Dios en Barcelona, dónde le fueron practicadas numerosas pruebas en las que la conclusión era que se sospechaba por la imagen característica de la resonancia magnética que se trataba de la enfermedad de Alexander, pero que hasta que no se realizara un análisis genético de ADN no se podía confirmar o no.

Me puse en contacto con una doctora neuropediatra de Jaén llamada Concha Sierra Córcoles, le expuse lo angustioso de mi situación y me prometió que ella buscaría el diagnóstico exacto de la enfermedad de mi hijo.Noche tras noche, me sentaba ante mi ordenador y buscaba doctores o científicos que estuvieran trabajando en esta enfermedad tan rara. Fué así como descubrí que en Ámsterdam, la doctora Marjo Van der Knaap podía llevar a cabo el análisis genético para confirmar o no que mi hijo padecía la enfermedad de Alexander. La doctora Concha Sierra del Hospital Complejo Hospitalario de Jaén le envió a la doctora Van der Knaap la resonancia magnética y la sangre de mi hijo para poder por fin al cabo de un año diagnosticarlo.Rogué a Dios por que las sospechas de los médicos no se confirmaran, pues de ser la enfermedad de Alexander ya nunca más podría mirar a mi hijo de la misma manera, pues la enfermedad de Alexander como anteriormente he expuesto lo condenaría a la muerte y además lentamente de una forma tan cruel que dudaba mucho de que como madre pudiese aguantar esta tragedia.Las pruebas genéticas llegaron y se confirmó la enfermedad de Alexander.

Me trasladé después hasta Francia al Centro Europeo de Referencia para la Leucodistrofia, dónde la profesora Odile Boesploeufg Tanguy le practicó a Juanma numerosas pruebas para confirmar también ella la enfermedad de Alexander pero apuntando que se trata del mejor caso que hay en Europa pues conserva aún la mayoría de la mielina en piernas y brazos y es por eso que se encuentra en una fase inicial de la enfermedad.A los 5 meses del diagnóstico de mi hijo, a mí me descubren un cáncer de mama en estadio avanzado, debido seguramente al sufrimiento que vengo padeciendo por la enfermedad de mi hijo. Me extirparon la mama izquierda, me sometieron a un año de dura quimioterapia, y posteriormente a radioterapia. De todo esto hace tan sólo unos meses. Fui derivada a la unidad de Psicología Oncológica para ser tratada por la psicóloga pues mi sufrimiento podía hacer evolucionar negativamente mi propia enfermedad.

Se me desaconsejó seguir buscando en Internet soluciones para mi niño e igualmente se me aconsejó aceptar su diagnóstico es decir, su futura degeneración y muerte. Cuando estaba con el tratamiento de quimioterapia, escribí en la revista Amama (asociación de mujeres mastectomizadas de Almería) que la vida es bella, animando a las personas que padecen cáncer a seguir ilusionadas y a luchar por la vida, sin nombrar la enfermedad de mi hijo, yo hablaba de que tengo 2 razones para esta lucha: mis dos hijos, mis dos luceros.Mi marido, que trabajaba en Holcim, en Gádor tuvo que dejar su trabajo para cuidar de los niños y además de mí, durante un año, puesto que el cáncer estaba muy avanzado localmente las sesiones de quimioterapia habían de ser muy duras y los efectos eran muy duros también.

Económicamente no podíamos permitirnos esta situación, así que tuvo que contratar a un chófer, que se hiciese cargo de su trabajo. Cuando terminé la radioterapia, volví a buscar en Internet médicos que trabajaran con la enfermedad de mi hijo, otra vez noche tras noche. Fue así cómo descubrí la persona de Albee Messing, un científico estadounidense que trabaja en el Waisman Center, en la Universidad de Madison , en el estado de Wisconsin. Este científico trabaja exclusivamente en la enfermedad de Alexander en colaboración con el profesor Goldman de la Universidad de Columbia en Nueva York, y el profesor Michael Brenner en la Universidad de Alabama.

Me puse en contacto con ellos, hablé telefónicamente con el profesor Goldman que me preguntó por el desarrollo de la enfermedad en mi niño y me dijo que estaba siendo muy atípica por la evolución tan lenta.Me hice socia de la United Leucodistrophy Foundation con sede en Illinois, que es la asociación americana para la lucha contra la leucodistrofia.

He mantenido contactos en varias ocasiones con el profesor Messing, que me comunicó que tenía 12 pacientes con la misma mutación que Juanma y me confirmó que efectivamente, el trabajaba en esta enfermedad desde el 2001, fecha en la que él y su equipo, en colaboración con la doctora Odile del Centro de Referencia de Leucodistrofia en Europa la descubrieron.

Me envían desde la ULF revistas mensuales en las que dan cuenta de los symposium internacionales que se llevan a cabo y en los que intervienen científicos de todo el mundo que trabajan en leucodistrofia y en la revista del mes de noviembre anuncian que el profesor Albee Messing, ha expuesto en el congreso que tras haber trabajado con más de 3000 fármacos, ha encontrado 42 que resultan eficaces en la lucha contra la enfermedad de Alexander.

Al fin vislumbro la luz al final del túnel. Mis plegarias son escuchadas. En la revista del mes de diciembre, el profesor Messing mediante la ULF, convoca una cita para todos los padres del mundo que tengan niños con la enfermedad de Alexander. Verdaderamente es la luz al final del túnel.
Ahora lo que necesita este doctor es apoyo económico para hacer que cuanto antes el fin de esta pesadilla sea realidad mediante un tratamiento. Me planteo que si he sido capaz de estar viva hasta aqui, el dinero no me puede impedir seguir luchando por la vida de mi niño. Y pido ayuda, desde la TV, desde la radio. Me dedico a hacer huchas por la noche, cuando acuesto a los niños. Huchas que voy repartiendo por Almería, en bares, estancos, farmacias, etc. Es por esta razón que me dirijo a ustedes, para solicitarles su ayuda.
Por que quiero darle vida a mi hijo antes de que poco apoco la vaya perdiendo, antes de que se quede ciego, sordo o tetrapléjico. Por que aún no ha perdido nada y es que lo que se pierda aunque después se le aplicara el tratamiento lo que hubiera perdido no se recupera pues la mielina destruida no se regenera. Todos estos datos que en esta carta les expongo, van acompañados de documentos médicos, para que ustedes puedan comprobar su veracidad. Mi hijo, Juanma, es hoy 18 de diciembre, un niño normal que esta mañana he dejado en su colegio de el Toyo, en Retamar, ayúdenme, por el amor de Dios, a que siga siendo normal, a que pueda vivir.

Desde lo más profundo de mi corazón, les agradezco el interés y el tiempo que me han dedicado con la lectura de esta amarga , pero ahora esperanzadora carta.

GRACIAS. Suya siempre Mª Antonia Fenoy Ramón”



Extraido de http://www.ayudajuanma.es/

22.5.08

En la "calle" 30 no se escucha cadena dial...

... aunque me cae fatal el "Cárdenas" de las narices, porque:
  • Es un egocéntrico
  • Habla sentando cátedra
  • No vocaliza bien para ser locutor
Pero ese es otro tema,
tampoco se escuchan los 40 principales, ni ninguna otra cadena de música presintonizada en mi radio.
Así que tengo que ir escuchando la SER (o más bien la publicidad de la SER), o al loco de la colina de la COPE, que habla con tan mala hostia que me pone a mi también de mal humor.
En fin, lo que sí tengo que reconocer es que por la "calle" 30 se circula mucho mejor que por la antigua m-30.

Ayer tenía un montoncito de ropa plancha encima de mi mesa. También mi cama se hizo sola...
Tengo miedo.

12.5.08

Todo en cajas

Mi cambio para Mayo se ha ido al traste, pero al mal tiempo buena cara.

Es realmente difícil encontrar el trébol de la suerte en un frondoso bosque, pero si no lo intentas y simplemente te quedas lamentando lo imposible que es, SEGURO que no lo hayarás NUNCA.
La moraleja de ese cuento era que la suerte no se encuentra, se busca.


Un cambio de actitud me ha venido muy bien. Aprendo a apreciar todo lo bueno que tengo a mi alrededor, o a mi alcance y así todo es más fácil.

Tengo todo en cajas, y estoy preparada para volver temporalmente a mi antigua vida.
Volveré a escuchar todo lo que me que quieran decir... Y también esperaré si hace falta para empezar a hacerlo.

6.5.08

Astenia primaveral

astenia: Falta o decaimiento de fuerzas caracterizado por apatía, fatiga física o ausencia de iniciativa.

El nivel de polen de gramineas y de olivo se disparan en esta época del año. Algo muy malo para los que sufrimos alergias a estas plantas...


Desde la última privamera que puedo recordar me pasa lo mismo. Me cuesta abrir los ojos por el sol, me duermo por las esquinas, no tengo ganas de nada...
Me imagino que todo esto se deberá en parte al chute de antihistamínicos que llevo en vena, que según dice el prospecto, tomándolos no podré manejar maquinaria pesada debido a sus efectos soporíferos.

Otra primavera más... Que rápido pasa la vida.
Dentro de poco David, Vane, Juan y Elena vivirán pendientes del euribor durante no menos de 35 años...
¡Como se me hacen mayores ya los muchachos!